Queridos Carlistas:
Mi tarea de Embajador cerca de la Santa Sede, me impide en contra de mi ardiente deseo, estar a vuestro lado en esta triple efeméride, tan tremendamente significativa para el carlismo.
Tengo siempre ante los ojos, el ejemplo de mi abuelo, el ejemplo de mi padre, su total compromiso con el Carlismo, su tradición, su dinámica audaz y renovadora en todos los campos de la libertad y del compromiso social que reclama nuestra presencia cristiana.
Aunque seamos aparentemente pocos, aquello por lo cual luchamos, se levanta como otra gran esperanza del momento actual y puede, en un futuro próximo, crecer y responder a las problemática del futuro.
Por esto os pido celebrar estas efemérides, en la alegría y con la resolución de una militancia más activa que nunca.
S. A. R. El Príncipe Don Jaime de Borbón Parma
Mi tarea de Embajador cerca de la Santa Sede, me impide en contra de mi ardiente deseo, estar a vuestro lado en esta triple efeméride, tan tremendamente significativa para el carlismo.
Tengo siempre ante los ojos, el ejemplo de mi abuelo, el ejemplo de mi padre, su total compromiso con el Carlismo, su tradición, su dinámica audaz y renovadora en todos los campos de la libertad y del compromiso social que reclama nuestra presencia cristiana.
Aunque seamos aparentemente pocos, aquello por lo cual luchamos, se levanta como otra gran esperanza del momento actual y puede, en un futuro próximo, crecer y responder a las problemática del futuro.
Por esto os pido celebrar estas efemérides, en la alegría y con la resolución de una militancia más activa que nunca.
S. A. R. El Príncipe Don Jaime de Borbón Parma
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